
REUNIÓN. Para julio se ha programado la reunión interparlamentaria entre Perú y la UE, donde se abordarán temas como el crimen organizado y la crisis climática.
Seguridad, medio ambiente, infraestructura digital y lucha contra el crimen organizado. Estos son algunos de los ejes con los que la Unión Europea (UE) busca reforzar su política exterior hacia América Latina, en un contexto marcado por el avance de las inversiones chinas y por la redefinición de las relaciones con Estados Unidos.
A través de programas de cooperación, encuentros diplomáticos y nuevas estrategias de inversión sostenible, el bloque europeo busca posicionarse como un socio estratégico para los países latinoamericanos.
OjoPúblico participó en un programa organizado por el Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) —la entidad a cargo de la política exterior de la UE— y constató el interés del bloque en estrechar sus vínculos con América Latina.
Durante una serie de reuniones en Bruselas, funcionarios europeos destacaron su preocupación por la inseguridad regional y el impacto de la crisis climática, así como su intención de ofrecer una alternativa frente a la creciente presencia de China.
El bloque europeo busca posicionarse como un socio estratégico para los países latinoamericanos".
Un ejemplo concreto del interés de la UE sobre la situación de inseguridad en América Latina es el Programa de Asistencia contra el Crimen Transnacional Organizado (EL PAcCTO), que acaba de celebrar su reunión anual, en Lima. La delegación la lideró Javier Samper, director del programa.
El enfoque central del programa es incidir en las políticas públicas de seguridad en una época en que las organizaciones criminales no se limitan a una sola actividad ilícita, sino que operan simultáneamente en varios frentes.
Además, a inicios de julio, Bruselas acogerá la reunión interparlamentaria entre Perú y la UE, donde se abordarán temas como el crimen organizado y la crisis climática. Así lo confirmó la europarlamentaria italiana Cristina Guarda, vicepresidenta de la delegación para las relaciones con la Comunidad Andina.
Estados Unidos y China
“Socio natural”. Esta expresión fue repetida más de una vez en las reuniones del SEAE. El bloque europeo aspira a fortalecer sus nexos con América Latina en un escenario internacional marcado por la administración de Donald Trump en Estados Unidos, y la creciente influencia de China en el mundo.
Sobre Estados Unidos, en la UE, se asume que la relación debe mantenerse en términos de pragmatismo, pese a la retórica hostil de Trump y sus amenazas —hasta ahora postergadas en la mayoría de bienes— de imponer aranceles comerciales.
Una funcionaria especializada en temas bilaterales con Estados Unidos señaló que, si bien existe potencial para que la situación retorne a la normalidad, la UE está preparada para defender sus intereses, aunque están bastante lejos de querer una guerra comercial trasatlántica. Consideró que la hostilidad retórica de Trump está más dirigida contra la UE como institución, que hacia los países que la integran.

CUMBRE. Lima fue sede del Programa de Asistencia contra el Crimen Transnacional Organizado (EL PAcCTO), que asiste técnicamente a 18 países de América Latina.
Foto: El PACcTO.
OjoPúblico también comprobó que la UE sigue con atención el avance sostenido de China en América Latina. Incluso, corresponsales con base en Bruselas coincidieron en señalar que la potencia asiática ha ganado terreno y afianzado su presencia con inversiones de gran escala.
La UE no quiere quedarse atrás. Entre sus representantes se insiste en que, a diferencia de China, Europa representa una propuesta basada en valores democráticos y en la defensa de los derechos humanos, principios que —se considera— también comparte América Latina.
Una herramienta de la UE para acercarse más a América Latina es la Global Gateway, una iniciativa que impulsa vínculos “inteligentes, limpios y seguros en los sectores digital, energético y del transporte”. Esta estrategia contempla más de 130 posibles proyectos de infraestructura.
En ese sentido, la Alianza Digital UE-América Latina y el Caribe, impulsada por la Global Gateway, propone una “transformación” basada en “conexiones confiables y sostenibles con los países socios”.
La Unión Europea considera que su relación con Estados Unidos debe continuar en términos pragmáticos".
Actualmente, está en marcha el Programa Bella II para conectar a Perú, Guatemala, Costa Rica, El Salvador y Honduras con el cable submarino de 35.000 kilómetros que une a América Latina con Europa, y que ya beneficia a Brasil, Ecuador, Chile, Panamá, Argentina y Colombia.
¿Por qué la UE pone énfasis en la Global Gateway? Hay un reconocimiento de que los equilibrios de poder global han cambiado, lo cual afecta directamente a Europa. A eso se suman retos económicos, un aumento del proteccionismo, tensiones sobre recursos naturales y una crisis de gobernanza mundial.
Global Gateway propone superar el paradigma tradicional de ayuda al desarrollo, mediante el impulso de inversiones sostenibles y con altos estándares sociales y ambientales. Un representante europeo dijo que el objetivo es crear vínculos, no dependencias.
Sin embargo, a veces, resulta complicado exigir niveles altos para la protección del medio ambiente. Un ejemplo es lo que ocurrió con la norma europea contra la deforestación, conocida como Reglamento sobre Productos Libres de Deforestación (EUDR), que prohíbe la comercialización en la Unión Europea de productos asociados a la deforestación o degradación forestal.
La Unión Europea es consciente de que la potencia asiática ha ganado terreno en la región, a través de inversiones de gran escala".
Aunque estaba previsto que la norma entrara en vigencia en diciembre de 2024, la Comisión Europea —la institución responsable de promover nuevas leyes en la UE— propuso su postergación por un año. La decisión fue adoptada luego de presiones de industrias, partidos políticos y países exportadores como Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Venezuela y Perú, según reportó la agencia EFE.
En mayo pasado, la Comisión Europea publicó la lista de países cuyas exportaciones a la UE pueden generar deforestación en origen. Ningún país latinoamericano fue clasificado en la categoría de "riesgo alto" ni "riesgo medio". Perú figura como país de “riesgo estándar”. Un funcionario reconoció que a la UE se le está haciendo difícil tener consenso, porque es "complicado el equilibrio entre lo verde y la competitividad”.
Hace poco más de un mes, como reportó OjoPúblico, un reciente estudio de Global Canopy —organización basada en Oxford, Inglaterra— reportó que, en 2024, apenas 16 de 500 compañías del mundo implementaron “medidas creíbles” para eliminar la deforestación en sus cadenas de suministro.
Del total, solo tres son peruanas: Corporación Perales Huancaruna - Corporación Perhusa (dedicada a la producción de café), Machu Picchu Foods (cacao) y Alicorp (aceite de palma). Ninguna de ellas superó el 15% de score de cumplimiento.
En la UE, en tanto, hay expectativa sobre lo que pueda generar la próxima cumbre entre la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y la UE, programada para noviembre de este año, en Santa Marta, Colombia. Sin embargo, el acercamiento dependerá de lo que Europa sea capaz de ofrecer a una región con múltiples problemas y urgencias.