Solo en los dos primeros años de gestión, entre setiembre de 2021 y junio de 2023, el actual Congreso de la República ha gastado S/1’606.604 en viajes al extranjero. Este monto corresponde a la suma de los pasajes —S/841.086— y los viáticos —S/765.518—, revela esta investigación de OjoPúblico, realizada a partir del análisis de una base de datos construida con información de todos los viajes reportados oficialmente por esta institución.

Las bancadas con los congresistas más viajeros son Fuerza Popular con 36 viajes por S/503.929 y Acción Popular con 20 viajes por S/234.124.

Ambas bancadas tienen a los parlamentarios que más gastaron en viajes al extranjero: Juan Carlos Lizarzaburu (S/303.000), Ernesto Bustamante (S/106.453) y María del Carmen Alva (S/90.869). Además de ellos, también destaca Jorge Zeballos Aponte (S/98.407) de Renovación Popular. 

El análisis identifica que el 44% de los 130 congresistas (57) salieron del país. Algunos viajaron más de una vez: en total se registran 143 viajes, de los cuales 115 implicaron gasto público.

Para los mismos, 52 parlamentarios requirieron presupuesto del Congreso: cada viaje costó desde S/1.450 hasta S/28.150. Otros cinco congresistas lo hicieron por su cuenta o financiados por las entidades que organizaron el evento al que participaron. 

El reglamento del Congreso obliga a que luego de realizado el viaje, el parlamentario debe presentar un informe al Consejo Directivo. Sin embargo, OjoPúblico encontró que en 22 viajes no se presentó dicho informe, incluso pese a haber incurrido en gastos al Estado. 

Para esta investigación se contrastó también las resoluciones de los Consejos Directivos y una base de datos de todas licencias otorgadas. En este último caso se identificaron 72 viajes adicionales que no figuraban en los informes de viajes al exterior ni en el reporte de gastos y que involucran a 22 congresistas, que pidieron permiso para salir del país, pero no emitieron informes de gasto público.

A nivel general, los principales destinos a los que viajan los congresistas son Estados Unidos (20), Panamá (17), España (11), Colombia (10), Argentina (9), Brasil (7), Italia (7), Marruecos (6), Egipto (5) y Baréin (4). Los eventos a los que más asistieron fueron reuniones de parlamentarios, ferias tecnológicas, conferencias de organismos internacionales, entre otros.

Cada viaje de un congresista costó desde S/1.450 hasta S/28.150

En la indagación de datos, OjoPúblico identificó que la información sobre el tema que se analiza en este reportaje está muy dispersa: por un lado figuran los gastos de los congresistas en los viajes que realizan, por otro lado están los informes con el detalle de estos, y de otro lado se puede encontrar más viajes en las resoluciones de las licencias otorgadas. No hay un apartado que centralice todo el detalle de las visitas al extranjero que realizan los representantes y la utilidad que estas generan a la labor parlamentaria. 

Al respecto, el director ejecutivo de Proética, Samuel Rotta, manifestó que hay mucho desorden al respecto y eso explica gran parte del problema. “El reglamento debería ser más prolijo en establecer plazos y parámetros para la rendición de cuentas. Y la web debería consolidar en un solo espacio la información en formatos amigables y abiertos”, apuntó. 

En ello coincide la politóloga Patricia Paniagua, que señala que la información debería estar sistematizada para tener un mejor control, y en aras de la transparencia, para que la ciudadanía también sepa qué se está haciendo y cuánto de esas actividades han demandado presupuesto público.

Los viajes deberían ser excepcionales y muy bien evaluados antes de realizarse".

Por su parte, Iván Lanegra, secretario general de la Asociación Civil Transparencia, explica que hay dos tipos de viajes que se realizan en el Parlamento. Primero están los oficiales, donde es inevitable la participación, dada la relevancia, lo cual está justificado porque es indispensable la representación por parte del Congreso. 

Y los otros son los viajes relacionados a invitaciones de diversa naturaleza que reciben los congresistas para participar en eventos, seminarios o para conocer el funcionamiento de alguna organización. Aunque la mayoría de esta categoría son financiados por los organizadores, es aquí donde recaen los cuestionamientos sobre qué tan importante es realizar ese viaje y cuáles son los aportes que brindan. 

Ante ello, el especialista señala que deberían establecerse criterios más claros para la autorización de los viajes que realizan los parlamentarios, según la importancia y cuánto aportan a la labor congresal, sobre todo aquellos que implican gasto público.

“Deberían ser muy excepcionales y muy bien evaluados antes de realizarse. Solo si de verdad generan algún tipo de impacto muy fuerte sobre su labor podrían tener alguna justificación, sino deberían ser los menos posible. Pero hemos visto en el Congreso, no solo de ahora sino desde hace un buen tiempo, que muchas de estas actividades parecieran no ser tan relevantes. Y, por lo tanto, no parece haber mucha justificación de por qué aceptar, no parece generar algún tipo de cambio sustantivo a la tarea de los congresistas”, reflexiona Lanegra. 

 

Congresistas que más gastaron en viajes 

El parlamentario en quien el Congreso gastó casi la quinta parte del presupuesto destinado a este fin es Juan Carlos Lizarzaburu Lizarzaburu (Fuerza Popular), que realizó un total de 13 viajes al exterior, principalmente por la Semana de Representación. Por cada viaje utilizó hasta S/23.000, entre viáticos y pasajes; y las veces que lo acompañó su asesor, la cifra se duplicó y costó en total hasta S/47.600, monto de su visita a España en junio de 2022. 

Así, el parlamentario irrogó en total S/165.173 en sus viajes en casi dos años, y sumado a que en la mayoría de sus trayectos viaja con un asesor, el gasto total de sus visitas superan los S/303.000. Sus principales destinos son Estados Unidos y España. Es preciso señalar que Lizarzaburu fue elegido como congresista representante de los peruanos en el exterior, y en el año 2022 impulsó una ley para permitirle viajar al extranjero en la Semana de Representación, y la gestión de María del Carmen Alva aprobó, además, que lo pueda acompañar un asesor. 

En la misma bancada de Fuerza Popular está el segundo congresista con más viajes registrados: Carlos Ernesto Bustamante Donayre. El parlamentario gastó un total de S/106.453 en seis viajes a Estados Unidos, España, Uruguay, Ruanda (África) y Baréin (Asia). 

Pero aparte realizó otros cuatro viajes que no generaron gastos al Congreso, entre los que figura su cuestionada visita a Marruecos (África) en mayo de 2023 en plena Semana de Representación, junto a Rosangella Barbarán (Fuerza Popular), María del Carmen Alva (Acción Popular), José Cueto (Renovación Popular) y Rosselli Amuruz (Avanza País), el cual fue financiado por el gobierno de ese país. De estos, solo Cueto y Amuruz cumplieron con presentar el informe de las actividades realizadas en el viaje. 

VIAJE CUESTIONADO. La comitiva liderada por Ernesto Bustamante viajó a Marruecos entre el 29 de mayo y el 2 de junio, en plena Semana de Representación. 

Imagen: Diplomacía Marroquí

 

La tercera congresista que más gastos en viajes al extranjero ha cubierto el fisco peruano es María del Carmen Alva (Acción Popular), quien realizó siete viajes con un gasto total de S/90.869, generalmente en su calidad de presidenta del Congreso. Sus destinos fueron Panamá, Estados Unidos, Ruanda, Baréin, Uruguay, España e Italia. 

Aparte, la expresidenta del Parlamento realizó un viaje para la Cumbre de las Américas en Estados Unidos, pero no emitió informe del detalle de las actividades realizadas ni el reporte de gastos. Su visita sí figura dentro de las licencias aprobadas y en fotos del informe de otros congresistas que asistieron al mismo evento. 

Además, María del Carmen Alva solicitó licencia del 7 al 9 de noviembre de 2022 para viajar a Bélgica y participar en un curso sobre Gestión de la Cooperación Internacional para el Desarrollo. Sobre esto no presentó un informe detallado ni tampoco figura en el reporte de gastos. 

Otro congresista que llama la atención en sus gastos por viajes es Jorge Zeballos Aponte (Renovación Popular), también representante de peruanos en el exterior, con un total de S/98.407. Esto considerando que se destinó S/53.272 en cuatro viajes realizados hacia Estados Unidos y España, y sumado a que en tres ocasiones lo acompañó su asesor Jorge Zeballos Hurtado, en quien se utilizó S/45.135. 

Un dato que resalta es que en dos viajes a Estados Unidos, los gastos en viáticos del asesor duplican a los gastos del mismo congresista. Por ejemplo, en el viaje del 15 al 22 de mayo del 2022, el congresista Zeballos Aponte gastó S/6.432, mientras que su asesor Zeballos Hurtado registra gastos por S/11.511. Similar situación se registra en el viaje de octubre de ese mismo año. 

Las bancadas más viajeras 

La bancada de Fuerza Popular es la que aglutina a los congresistas con más viajes al exterior, por ende el gasto es mayor: más de medio millón de soles —S/503.929—. Esta suma equivale a la tercera parte del total destinado para viajes en los dos años de legislatura analizados, que fue de más de S/1’600.000. 

Los congresistas Juan Carlos Lizarzaburu y Carlos Ernesto Bustamante, que encabezan la lista general, abarcan casi el 90% de lo gastado en esta bancada, con un total de S/447.389. 

Aparte de ellos, figura el congresista Luis Cordero Jon Tay, con tres viajes. El legislador fue a Letonia en junio del 2022 y Francia en noviembre del 2022 para eventos relacionados con la Red Parlamentaria Global de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Además, realizó un viaje a Panamá en febrero de este año para asistir al Foro Parlamentario de Inteligencia y Seguridad, organizado por el Parlamento Latinoamericano y Caribeño (Parlatino), del que no reportó gastos ni presentó el informe sobre sus actividades, pero sí figura en fotos del informe que presentó el congresista Ernesto Bustamante, quien también asistió al mismo evento. 

Los otros siete parlamentarios de Fuerza Popular que figuran en la lista de los más viajeros son Luis Alegría, con tres viajes a Colombia en noviembre del 2022 y Brasil con motivo del Parlamento Amazónico (Parlamaz), además de Jeny Morales, Rosangella Barbarán, Patricia Juárez, Auristela Obando, Leslie Olivos y Hector Ventura, quienes realizaron solo un viaje financiado con recursos públicos, que demandaron entre S/5.000 y S/16.000 cada uno. En general, esta bancada tuvo como principal destino España, Estados Unidos, Colombia y Argentina, y los motivos más recurrentes fueron por asambleas o encuentros parlamentarios. 

Fuerza Popular alberga a los dos congresistas que más gastaron en viajes al extranjero: Juan Carlos Lizarzaburu y Ernesto Bustamante.

Otra de las bancadas cuyos miembros registran más salidas del país es Acción Popular: siete de sus congresistas realizaron 20 viajes por un total de S/234.124. Además de María del Carmen Alva, que en siete viajes gastó S/90.869, destaca también el congresista Wilson Soto Palacios, que realizó cuatro viajes a España, Uruguay, Argentina y Baréin, por un gasto total de S/60.637, principalmente para la Asamblea de la Unión Parlamentaria y un Seminario Regional de Cambio Climático. 

En tanto, Karol Paredes Fonseca gastó S/21.785 en dos viajes a Rusia (octubre del 2021) y Brasil (mayo del 2022) para el Parlamento Amazónico y el “Tercer Foro Euroasiático de Mujeres”, respectivamente. Mientras que Silvia Monteza requirió S/18.459 para tres viajes a Panamá en octubre del 2021 y Estados Unidos en mayo del 2022. 

Los que registran solo un viaje, mientras tanto, son Elvis Vergara y Luis Aragón que viajaron a Italia para la Conferencia parlamentaria COP26 en octubre del 2021, y Raúl Doroteo que fue a Hungría para asistir del “Foro parlamentario de seguridad e inteligencia (FPSI)” en setiembre del 2021. El promedio de gasto fue de S/14.000 cada uno. 

Sin embargo, el congresista Aragón realizó dos viajes adicionales por los que pidió licencia, según figura en las resoluciones del Consejo Directivo, pero no envió informe del detalle de sus actividades realizadas. Estos viajes fueron para asistir a eventos organizados por la empresa china Huawei. 

Uno fue en noviembre de 2022 a México, para la “Cumbre de Talento en Tecnologías de la Información y las Comunicaciones de América Latina y el Caribe”. El otro fue en febrero del 2023 y tuvo como destino España, donde participó del Mobile World Congress, junto a la congresista Patricia Chirinos (Avanza País). 

Este viaje fue cuestionado por denotar presuntos conflictos de interés, al ser financiado por la empresa tecnológica y, posterior a ello, se le acusó al legislador de impulsar proyectos de ley que favorecen a nuevos productos que Huawei tiene previsto lanzar en Perú, según reportó El Comercio. 

En Acción Popular, siete de sus congresistas realizaron 20 viajes por un total de S/234.124.

Perú Libre vendría a ser otra de las bancadas con mayor número de congresistas que viajaron al extranjero al identificarse 8 parlamentarios que acumularon 30 viajes por un gasto total de S/87.904. 

De este grupo, destaca Alfredo Pariona que viajó a México en noviembre del 2022 y a Panamá en mayo del 2023 para sesiones de la Comisión Interparlamentaria de Seguimiento a la Alianza del Pacífico (CISAP) por un total de S/15.386. 

En tanto, la congresista Margot Palacios registra 11 viajes, aunque ninguno de ellos implicó gastos para el Estado. Todos estos figuran en las licencias otorgadas, pero la parlamentaria solo emitió el informe de sus actividades en seis de ellos. Viajó, por ejemplo, a Nicaragua, Honduras y Colombia para participar en la asunción de los presidentes de estos países. 

Los otros parlamentarios de la bancada de Perú Libre son María Agüero, Waldemar Cerrón, Flavio Cruz, Américo Gonza, Kelly Portalatino y María Taipe. 

Es preciso señalar que, en mayo del 2022 un gran número de congresistas renunciaron al partido del lápiz y formaron el Bloque Magisterial. De este grupo identificamos a cinco parlamentarios que realizaron 12 viajes por un total de S/128.730.

El que más viajes realizó fue Alex Paredes, con cuatro salidas a España, Uruguay, Baréin y Ruanda por un total de S/69.327. En tres de esos viajes no figura el informe del congresista en el portal del Congreso sobre las actividades realizadas, pese a que generaron gasto público. Al ser consultado por OjoPúblico, Paredes aseguró que cumplió con enviar los informes de todos sus viajes: “Deben estar ahí [en el portal del Congreso]. Yo, a veces, doy el informe a la secretaria porque es la que conoce la ruta”, manifestó. 

Finalmente, respecto a los gastos por bancadas resalta también Renovación Popular, donde cuatro congresistas realizaron 14 viajes por un total de S/165.263; Avanza País con seis congresistas que en 13 viajes gastaron S/91.091; y Alianza para el Progreso con cuatro congresistas que demandaron S/82.255 en siete viajes. 

 

Los viajes más costosos

Cada uno de los viajes que realizaron los congresistas, desde setiembre del 2021 hasta junio del 2023, demandó entre S/1.450 y alrededor de S/28.000. 

De todos ellos, el viaje más costoso fue el que realizó Heidy Juárez (Podemos Perú) a Portugal, entre el 26 de junio y el 2 de julio de 2022, para participar de la Segunda Conferencia de las Naciones Unidas. El mismo demandó S/28.150. 

En este evento también estuvo presente el congresista Edward Málaga Trillo (no agrupado), quien gastó S/23.463. Con ello, el Congreso desembolsó S/51.619 para dicho encuentro, considerando el costo del pasaje y los viáticos. 

Un dato llamativo sobre este viaje a Portugal es que ambos congresistas participaron en la misma fecha, con lo que su pasaje les costó S/13.767 ida y vuelta a cada uno. Sin embargo, hay una diferencia considerable de S/5.000 en los viáticos: Juárez gastó S/14.389 y Málaga S/9.696. Ninguno de ellos emitió el informe con el detalle de las actividades realizadas y las conclusiones o aportes a la representación nacional. 

Al respecto, la politóloga Patricia Paniagua señaló que hay un serio cuestionamiento del manejo que hacen los congresistas con los recursos públicos que se les asigna para los viajes, lo que evidencia una falta de transparencia y responsabilidad. 

“Tiene que estar claro que no se trata de privilegios de los que ellos [los congresistas] se sientan en capacidad de hacer uso de manera indiscriminada o sin ningún control, sino que por el contrario son prerrogativas del cargo que tendrían que ser manejadas de manera muy escrupulosa, teniendo como premisa básica la transparencia en el momento de la rendición de cuentas, de los viáticos que reciben del Estado y también responsabilidad en cuanto al monto que estos viajes demandan y el beneficio que generan”, apuntó. 

Otro de los destinos en los que el Congreso gastó más fue el viaje a Ruanda (África), de María del Carmen Alva (Acción Popular), Ernesto Bustamante (Fuerza Popular) y Alex Paredes (Perú Libre), entre el 9 al 16 de octubre de 2022, para participar de la 145° Asamblea de la Unión Interparlamentaria (UIP) y en la sesión ordinaria del Grupo Regional de América Latina y el Caribe (GRULAC). Entre los pasajes —S/11.500 en promedio— y los viáticos —alrededor de S/14.000— se gastó en cada uno S/25.000, aproximadamente. En otras palabras, en conjunto, se acumularon S/77.584 por los tres. 

RUANDA. Los congresistas Alex Paredes, Ernesto Bustamante y María del Carmen Alva viajaron al país africano en octubre del 2022, donde gastaron alrededor de S/14.000 en viáticos.  

Fuente: Informe sobre el viaje a Ruanda del congresista Bustamante. 

 

Un mes después, en noviembre de 2022, surgió otro de los viajes que más costaron al fisco peruano, el de los congresistas Edward Málaga (no agrupado), Hitler Saavedra Casternoque (Somos Perú), María Taipe Coronado (Perú Libre) y Cheryl Trigozo Reátegui (Alianza para el Progreso) a Egipto (África-Asia), para participar de la 27° Conferencia de las partes de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP 27, en el que se gastó S/81.101. 

Un costo similar —S/81.651— demandó el viaje de cuatro congresistas —María del Carmen Alva (Acción Popular), Wilson Soto (Acción Popular), Ernesto Bustamante (Fuerza Popular) y Rosangela Barbarán (Fuerza Popular)— a España, entre noviembre y diciembre de 2021, para participar de la Asamblea de la Unión Interparlamentaria. 

Asimismo, en el reporte de gastos en viáticos y pasajes del portal de Transparencia del Congreso figura el viaje a Baréin (Asia), de los congresistas María del Carmen Alva, Ernesto Bustamante, Wilson Soto y Alex Paredes realizado en marzo de este año, por un total de S/62.400. 

Los que no enviaron informes 

Cuando un congresista viaja a un destino del extranjero, los congresistas deben cumplir con solicitar licencia y a su retorno emitir un informe sobre las actividades realizadas con los aportes de la representación nacional. 

“El trabajo del congresista es considerado a tiempo completo, los congresistas no tienen horario de trabajo, entonces cuando viajan al extranjero se van a ausentar y deben pedir licencia. Y, si salen con licencia del Congreso, siempre deben presentar un informe [de las actividades realizadas]. Puede ser que [el viaje] no sea financiado por el Congreso, pero sí oficial”, explicó el exoficial mayor del Congreso, José Élice. 

El reglamento del Congreso señala que, “luego de realizado un viaje oficial o de visita por cuenta del Congreso, el parlamentario debe presentar un informe al Consejo Directivo sobre todo aquello que pueda ser de utilidad al Congreso o al país”.

Sin embargo, de los 143 viajes registrados, en 22 de ellos no se presentó el informe de las actividades realizadas, pese a haber incurrido en gastos al Estado. OjoPúblico consultó por este tema al Congreso de la República y, aunque el área de Comunicaciones señaló que brindarían una respuesta oficial, la misma no se concretó hasta el cierre de este informe. 

En paralelo, este medio revisó 26 resoluciones de los Consejos Directivos de los dos años de periodo parlamentario, donde figuran las licencias solicitadas. En las mismas se identificaron 72 viajes que no figuran ni en los informes de los detalles de las actividades ni en el reporte de gastos. 

Los mismos comprenden a 49 congresistas que una o más veces pidieron licencia para viajar, pero no emitieron ni el informe con el detalle de las actividades realizadas ni las conclusiones de su participación. Tampoco presentaron un reporte de gasto, es decir, viajaron con sus propios recursos o fueron financiados por alguna entidad. De este grupo, las que más incidieron en ello son las congresistas Margot Palacios (Perú Libre) y Patricia Chirinos (Avanza País). 

Margot Palacios viajó a Paraguay del 2 al 5 de noviembre de 2021, en su calidad de presidenta de la Comisión de Pueblos Andinos. En setiembre del año pasado, fue a Chile para participar en el proceso de referéndum de la nueva Constitución, invitada por movimientos sociales y, ese mismo mes, viajó a Francia por una semana para participar en el “Festival de la Humanidad”. 

Luego, en febrero de 2023, pidió una licencia de nueve días (del 6 al 15 de febrero de este año) por un viaje a Francia, Suiza y Holanda, que fue sustentado según argumenta su participación en “múltiples actividades organizadas por diversas asociaciones de peruanos en el exterior”. 

Patricia Chirinos, en tanto, registra licencias para viajar a Colombia, en mayo de 2022, invitada por el Foro de Madrid para integrar la delegación de observación electoral internacional para la primera vuelta presidencial. Por el mismo motivo, en abril de ese año, viajó a Paraguay. 

También pidió licencia para viajar en febrero de 2022 a la ciudad de San José, en Costa Rica, en el que la representante de Avanza País no precisó el motivo. A este se suma otro viaje, de noviembre del año pasado, del que tampoco da detalles. En la licencia solo consignó que estaría “fuera del país”. 

Por último, en febrero de 2023, Chirinos viajó por una semana a Barcelona, España, para participar en el evento Mobile World Congress. Se trata del cuestionado viaje —financiado por la empresa china Huawei—, que realizó junto al congresista Luis Aragón. En su sustentación Chirinos consignó que asistió en calidad de vicepresidenta de la Comisión de Fiscalización. 

"Luego de realizado un viaje oficial o de visita por cuenta del Congreso, el parlamentario debe presentar un informe”.

Asimismo, se encontró que 22 congresistas solo solicitaron la respectiva licencia para viajar, pero en ninguno de sus viajes emitieron el informe de las actividades realizadas, ni el reporte de gastos. 

Ellos son Carlos Alva Rojas (Acción Popular), Diego Bazán (Avanza País), Sigrid Bazán (Cambio Democrático - Juntos por el Perú), Guillermo Bermejo (Perú Democrático), Miguel Ciccia (Renovación Popular), Jorge Flores Ancachi (Acción Popular), Elva Julon (Alianza para el Progreso), Jorge Montoya (Renovación Popular), Juan Burgos (ex Avanza País), Alejandro Cavero (Avanza País), María Cordero (exFuerza Popular), Alex Flores Ramírez (Perú Libre), Víctor Flores Ruíz (Fuerza Popular), Idelso García Correa (Alianza para el Progreso), Raúl Huamán Coronado (Fuerza Popular), Luis Kamiche (Cambio Democrático - Juntos por el Perú), Javier Padilla (Renovación Popular), Segundo Quiroz (Bloque Magisterial), Abel Reyes Cam (Perú Libre), Janet Rivas (Perú Libre), Silvana Robles (ex Perú Libre) y Carlos Anderson (ex Podemos Perú). 

OjoPúblico intentó comunicarse con los parlamentarios mencionados, y obtuvo respuesta del despacho de la congresista Sigrid Bazán, que alegó que no emitió informe de ninguno de sus dos viajes (Chile e India) porque no fueron en representación del Congreso ni en ejercicio de sus funciones. 

“Sobre el viaje a Chile, la congresista pidió licencia y costeó los gastos con su propio peculio. Sobre el viaje a la India, también se pidió licencia. Este no fue un viaje designado ni en representación del Congreso y fue costeado en su totalidad por el Gobierno de la India”, precisaron. 

Es así que, sumando estos 22 congresistas adicionales encontrados, más los otros 57 parlamentarios que sí dejaron registro de sus viajes, totalizan 79 los legisladores que salieron del país en los dos años de periodo. Esto es más de la mitad de los 130 representantes del Congreso. 

El representante de la Asociación Civil Transparencia, Iván Lanegra, considera que, más allá de los informes, deberían establecerse criterios más claros para la autorización de los viajes que realizan los parlamentarios, según la importancia y cuánto aportan a la labor congresal, sobre todo aquellos que implican gasto público.

“Me parece bien que se hagan informes, pero el problema parte de los criterios para decidir si viajan o no. El informe va a ser algo importante si, efectivamente, el viaje fue importante. Pero, si no fue así, entonces en el informe no vas a poder decir mucho (...) Pareciera como que casi hay una cuota de viajes, que le aprueban a todos, pero no hay criterios para una verificación clara para decir a donde van y a donde no ”, manifestó. 

 

Las licencias y el caso Digna Calle

Desde el 27 de julio de 2021—cuando se instaló el actual Congreso— hasta el 31 de mayo de 2023, los congresistas solicitaron 2.513 licencias. De este total, 1.125 corresponden al periodo anual de sesiones 2021-2022 y 1.388 al periodo anual de sesiones 2022-2023, según información analizada de las resoluciones del Consejo Directivo. 

La gran mayoría —691— son licencias oficiales. En otras palabras, estos se deben a que los congresistas no pudieron participar en sesiones de comisiones, del Pleno o de la Comisión Permanente por estar en otras actividades o actos oficiales propios de su labor parlamentaria o, en algunos casos, por ser designados ministros de Estado. 

Otra gran cantidad de licencias se dan por viajes. En total se registraron 605 permisos de este tipo en los dos periodos anuales de sesiones. De ese total, 250 fueron por viajes al extranjero. Además, se registraron 448 licencias por enfermedad, 397 licencias personales, 260 licencias por representación, y 112 licencias sin goce de haber. 

En este último caso, la congresista con más solicitudes de licencias sin goce de haber es Digna Calle Lobatón (Podemos Perú), que ni bien ocupó un escaño en el Parlamento solicitó licencia por 18 días, del 29 de julio al 15 de agosto de 2021. Luego, presentó 10 solicitudes por un total de 72 días.

Además, la congresista suma seis licencias personales que totalizan 47 días, todas de este año, entre febrero-mayo: siete días de febrero, 10 días en marzo, mientras que en abril pidió 30 días (del 3 de abril al 2 de mayo del 2023). 

Así, Calle Lobatón suma 119 días de licencias entre los dos periodos legislativos. En la sustentación no consignó detalles, solo figura “licencia personal” y “licencia sin goce de haber por motivos personales”. La parlamentaria tiene cuestionamientos por encontrarse fuera del país, desde febrero de este año. Desde entonces, radica en Estados Unidos, según reveló un reporte periodístico de Cuarto Poder. 

Aunque el vocero de su bancada (Podemos Perú), José Luna Gálvez, aseguró que la congresista ya regresaría al país, el último 26 de julio, Calle Lobatón presentó ante la Mesa Directiva otra solicitud de licencia personal, esta vez por 60 días. Si bien esta última fue rechazada, ello significa que la parlamentaria no pretende volver al Perú, por lo menos, hasta fines de setiembre. 

Ante las continuas licencias de Calle Lobatón, el último martes 1 de agosto, la congresista Kelly Portalatino la denunció constitucionalmente por infringir los artículos 92 y 93 de la Constitución y por abandono del cargo. Además, ha pedido su inhabilitación para ejercer la gestión pública por tres años. 

Esto fue secundado por la tercera vicepresidenta del Congreso, Rosselli Amuruz, quien el 3 de agosto presentó también una denuncia constitucional contra la parlamentaria por el presunto delito de abandono del cargo y abuso de autoridad. En este caso, se pide la inhabilitación por 10 años para ejercer cargos públicos. 

También destacan entre las licencias sin goce de haber los congresistas Elías Ávalos, con 13 solicitudes por 49 días; Rosselli Amuruz, con 7 solicitudes por 23 días, y Hernando Guerra García, con 11 solicitudes por 17 días, de los cuales siete fueron por encontrarse fuera del país. 

Ante los cuestionamientos generados por las prolongadas licencias de la congresista Digna Calle y, para evitar este tipo de casos a futuro, el Consejo Directivo del Congreso dispuso que la Comisión de Constitución revise el reglamento del Parlamento. Además, diversos congresistas han presentado iniciativas legislativas para limitar las licencias. 

Por ejemplo, el actual presidente del Congreso, Alejandro Soto (Alianza para el Progreso), presentó un proyecto ley para modificar el artículo 22 del reglamento, con el fin de fijar que la licencia sin goce de haber se dé como máximo por un plazo de siete días.

Crisis de representación 

Entre las irregularidades visibilizadas en los viajes que realizan los congresistas al extranjero y las licencias que solicitan, en ambos casos muchas veces sin mayor justificación, los especialistas consultados para este reportaje coinciden en que ello denota que los parlamentarios priorizan intereses personales antes que el cumplimiento del fin de su labor legislativa: representar a quienes los eligieron.

“La gran mayoría no tiene un vínculo político-ideológico con el cual partió y lo llevó al Congreso. Tiene más bien intereses personales, o particulares en todo caso, que dependen de organizaciones que pueden estar moviendo intereses de los grupos que lo apoyaron para financiar su campaña. Es un elemento muy presente en la política actual”, explica Iván Lanegra. 

Para Patricia Paniagua, el comportamiento de los parlamentarios frente a los gastos públicos en sus viajes recae en una degradación del manejo de las autoridades sobre las prerrogativas que tienen para el ejercicio de sus cargos. 

“Hay problemas muy sensibles que agobian a la población y que están siendo pasados por alto de una manera totalmente indolente, mientras siguen un tren de vida congresal, en el que están en una burbuja. Esto también le suma a este escenario en el que ya hay una reprobación total, de repudio, porque hay que llamarlo así. La población siente que la labor que cumplen es más ornamental, que no termina de impactar en la mejora de su calidad de vida, del bien común”, manifestó la politóloga. 

“El momento que vivimos nos habla de una crisis de representación enorme, y que no hay interés desde los representantes en el Congreso de solucionar el entrampamiento en el que estamos."

Los especialistas consultados por OjoPúblico señalan que, pese a tener más del 90% de desaprobación, los congresistas no demuestran mayor interés en remediar su imagen ante la población que los eligió. Esto debido a que, así como se ven cuestionamientos en el manejo de los viajes al extranjero, también cada día salen a la luz otras irregularidades en diferentes aspectos que involucran a representantes del Parlamento. 

“El momento que vivimos nos habla de una crisis de representación enorme, y que no hay interés, desde los representantes en el Congreso, de solucionar el entrampamiento en el que estamos. Muy por el contrario, parecieran dados a la tarea de ahondar o de ignorar el sentir ciudadano porque no causa ningún impacto en sus intereses que, para mí, van en dos sentidos: permanencia y uso de los privilegios de los que ya gozan”, lamentó la politóloga Patricia Paniagua.